Para Daili Valdez Valdez parecía casi una utopía su deseo de ser madre. El milagro de la vida que se siente desde el vientre en gestación llegaría de la mano de los doctores y especialistas de la consulta de asistida para atender a las parejas infértiles en el hospital general Abel Santamaría Cuadrado de Pinar del Río.

“Asistí a la consulta después de cinco años de estar con mi esposo sin quedar embarazada. En un inicio me trataron los especialistas de Endocrinología porque tenía un trastorno hormonal que me controlaron con medicamentos”- confiesa esta joven madre mientras sostiene a su pequeña en brazos.
"Después en la consulta de infertilidad el doctor Ángel Miguel Sarmiento me dio mucha seguridad y confianza. Allí me realizaron varios tratamientos que no fueron efectivos, entonces me sugiere la inseminación", explicó.

Agradecida
"Son personas muy buenas todos los que trabajan en la consulta, la enfermera Marelis, las muchachitas del laboratorio, porque nos tratan con mucho cariño. Ellas nos devuelven la fe. Al llegar allí vamos afligidas, con temor y con el deseo de ser madres, sueño de todas las mujeres, y estos especialistas con solo el trato y la sonrisa te devuelven la esperanza, su apoyo pienso es fundamental para cada familia. Les estoy muy agradecida.
"El doctor Ángel Miguel es muy bueno, consagrado, amable con mucho amor te llena de esperanza que es lo que más ansiamos cuando estamos en estas consultas porque realmente son tratamientos muy largos", afirmó Daili.

Premio al tesón, el fruto
"Fue un proceso lento pero muy agradecido en el tercer intento quedé embarazada,- sonríe con la mirada iluminada- yo no lo podía creer ni viendo el resultado del grabimund, incluso le dije al médico que hasta no ver el ultrasonido no lo creería. Pero era verdad dentro de mí ya se gestaba una niña. Gracias a Dios y a los especialistas logré salir embarazada, la noticia más feliz de mi vida.
"Ya tengo a una niña, se llama Ámbar y nació el pasado 19 de octubre. Recuerdo la emoción y la alegría cuando la tuve entre los brazos: me pareció un sueño. Pienso que todas las mujeres cuando son madres por primera vez sienten lo mismo. Es una bendición el mejor regalo para mí, para mi esposo y la familia".
Ámbar, sonríe desde el regazo de su madre con las canciones que le canta la abuela. Es un sueño convertido en realidad.
En un artículo del periódico Granma registra que 60 de cada 100 mujeres en Cuba que se someten a inseminación o a otros procederes logran embarazarse, entre ellas está la joven pinareña Daili Valdez Valdez, que contempla y acaricia con felicidad a su pequeña.