Lo mucho que tienen por vender, exportar y multiplicar
Las Industrias Locales Varias, rebautizada Ilova, han sido tan fustigada por sus incumplimientos en los últimos años, que ahora podría paradójico reconocer que su balance de 2019 fue un encuentro de valientes.
No solo se es valiente por el resultado, sino más todavía por el empeño de lo que falta, cuánto han conseguido y las intenciones de enmarcase en las exportaciones a pesar de las adversidades, como si fueran de los grandes… aunque podrían alcanzarlo.
Su dirección está convencida de que muchos de los problemas, aparte de las innegables necesidades, tiene una alta dosis de subjetivismo, conjugado por la morosidad de algunos cuadros, falta de iniciativa y urgencia de elevar la estima de todos sus trabajadores, porque durante mucho tiempo cargan sobre sus hombros la estigma de una deuda pasada superior a ocho millones, con los bancos negados a confiar en ellos e incluso todavía, una de sus UEBT Guane, con la cuenta embargada desde hace cuatro meses.
De manera general su baja producción del último trimestre se justifica por los déficits energéticos y especial el combustible; pero aunque no son priorizados en el esquema nacional, trabajan con 10 ramas productivas, con productos endógenos, y aparece la primera paradoja: la elaboración con madera, que aunque no reciben entrega por plan, es la única actividad que cumplieron en el año.
La situación de los productos derivados de la química fueron muy sentidos por roturas de la industria nacional y se quedaron al 90 por ciento y así, entres los incumplimientos viene el resto, como las confecciones textiles, fundición, producciones gráficas (que es una heroicidad por su obsolescencia tecnológica), la elaboración con cueros y la artesanía.
La artesanía tiene que abrirse camino también a otras variedades, como los objetos marinos
Juan Irán González Pita, director y, su consejo, son los primeros convencidos de que tienen buen tiempo a su favor, como dirá un marinero. En la química se proponen recuperar su prestigio con la pintura y ya están tramitando incluso exportaciones; en el cuero lo que necesitan es comenzar, porque la difícil materia prima la tienen en almacén, como otras producciones ociosas que inexplicablemente en algunos municipios no han comercializado, por ejemplo pelotas de béisbol para niños y platicos de cartón para festividades…
En el caso de las confecciones apuestan por recuperar la producción de guayaberas y cubayeras (una prenda para escolares no conocida aquí), pero que en ambos casos le interesan a negociadores panameños.
Pero la gran deuda de Ilova es la artesanía, que en su tiempo gozó de prestigio y la han perdido en algunos artículos, como los con los productores y talleres de Manuel Lazo, en el extremo occidental, que hacen maravillas con objetos marinos y mientras en ferias de otras provincias las reclaman, pinareños no ha podido imponer esas piezas con sus símbolos.
Es difícil aquí volcar la amplitud de detalles en el balance, pero son necesario los ejemplos, para poder justificar por qué los llamamos valientes: son los fueron los primeros empresarios autorizados en la provincia para importar y exportar, en diciembre último realizaron la primera hacia España; tienen los permisos de negociaciones para comenzar a vender en tiendas O line con la marca Excelencias y se han insertado en las ventas en el sistema de Mariel.
Esta empresa tiene la peculiaridad de producir lo que más reclama a diario el ciudadano de a pie, sin embargo quizás el recomiendo no es general; hay muchos slogan nacionales de los nuevos tiempos, pero el estigma no desaparecerá hasta tanto no se confié más en ellos.
Tienen problemas inmediatos de fácil solución, si lo hacen con aceleramiento, porque una parte de los cuadros y de los trabajadores se entregan totalmente a lo suyo, tienen que pagar y cobrar sus cuentas pendientes; la indisciplina laboral y el ausentismo no son buenas consejeras, pero quizás haya otros retos y, aun así, no renuncian.
Estos mobiliarios y las alfombras de guano cana son muy demandadas por la playas europeas y van camino de ellas
Hay que desplegar iniciativas en todas las producciones, hacer crecer la artesanía, la producción textil, la química y la fundición, para no citarlas a todas, pero alcanzar la estatura de la industria gráfica que casi produce de la nada.
Tienen buen aparato de comercialización, pero lo necesitan mejor en producción, y hacer valer su divisa de Ilova, creativa siempre.