La GM pinareña Lisandra Ordaz se alzó con el título en el campeonato nacional de ajedrez para mujeres que se desarrolló en la provincia de Holguín.

La vueltabajera pactó tablas con la experimentada Maritza Arribas en la última ronda, pero en el sistema de desempate aventajó a la habanera Yuleisy Hernández ya que ambas acumularon ocho unidades.

“Más que el significado personal es un regalo para mi familia y para todos los seguidores; es una asignatura que tenía pendiente y la verdad estoy contenta por el resultado.

“Me preparé bien para la competencia porque sabía que iba a ser un torneo bien difícil, pues jugué contra jugadores reconocidas y que había enfrentado en varias ocasiones.

“La experiencia me ayudó mucho a ser paciente, a ir acumulando poco a poco puntos y de esa forma terminar invicta, algo que fue importante a la hora del desempate”.

El ajedrez femenino en Cuba goza de gran competitividad a pesar del poco roce internacional con el que cuentan las trebejistas; sin embargo, la calidad individual existe y debe potenciarse por parte de las autoridades del deporte.

“El problema del ajedrez femenino es la falta de torneos para que las muchachas puedan elevar su Elo, porque la fuerza de juego está. Son jugadoras con mucha experiencia que han estado en mundiales, olimpiadas, continentales y también panamericanos y en estos momentos la media es muy baja para el rating.

“Creo que la comisión nacional debe encontrar alguna estrategia para buscar más eventos internacionales y que el ajedrez femenino se siga desarrollando”.

Este triunfo no es obra de la casualidad ni cosa de un día. Son años de sacrificio y estudio en los que la familia, amigos y seguidores en general han jugado un papel fundamental.

“Un beso bien grande a mi esposo, a mis padres, a mi hermano y a todos los que de cierta forma han dado su granito de arena; para que el resultado llegue en este momento.

“Muchas gracias de corazón a todos los seguidores del ajedrez en Cuba que por estos días me enviaron mensajes por todas las vías para apoyarme. Esas muestras de cariño llenan de satisfacción y además me dan fuerzas para seguir adelante”.