Los alfabetizadores palaceños que enseñaron a leer, escribir, contar, pensar y soñar, y ahora han qedado en casa por la epidemia, se sienten más útiles que nunca, pues desde sus hogares se sumaron a la fabricaciòn de nasobucos y, en el caso de los más avanzados, para ayudar en la educación de sus nietos y familiares, por poseer fuentes de conocimiento inagotable.
En Los Palacios la Peña de Alfabetizadores y, aunque no se pueda reunir como en años anteriores, desde las redes sociales comparten experiencias con usuarios y resaltan días históricos y cumpleaños de sus integrantes, en un espacio para promover la educación y la historia.