Después de varios días de lluvia continua, la agricultura pinareña se encuentra en tensión. Suelos saturados, campos anegados, y el pronóstico de que continuará lloviendo, han disparado las alertas en un sector que se halla inmerso en poner punto final a la recolección de la cosecha tabacalera, y en el inicio de la campaña de primavera de los cultivos varios.Cuando todavía queda más de una semana para que concluya el mes de mayo, los especialistas de la Empresa de Aprovechamiento Hidráulico señalan que ya se sobrepasó la media histórica de precipitaciones.
En sentido general, los embalses pinareños se encuentran al 74% de su capacidad de llenado, lo que significa que aún pueden asimilar mucha agua.
Sin embargo, no puede decirse lo mismo de los campos pinareños, donde ya llueve sobre mojado.
De momento, se ha detenido la recolección en las plantaciones tabacaleras que quedan en pie, correspondientes a la mayor campaña de la última década, en la que llegaron a plantarse más de 19 000 hectáreas.
Lo mismo sucede con la zafadura del tabaco seco, por los elevados niveles de humedad relativa existentes.
A simple vista, se aprecian cultivos inundados en las zonas bajas. No obstante, todavía es muy pronto para hablar de afectaciones, sobre todo porque no se sabe cuánto más puede llover.