"Cuando el hombre sirve, la tierra sirve" es el precepto que acompaña a Walfrido Pérez Díaz, administrador de la casa de alojamiento del Entronque de Los Palacios.

Y es que las personas no comprenden, que  ha aplicado a sus tierras  alrededor de su establecimiento para estar  reverdecidas.

 Este hombre, con el oído pegadito a la tierra y consciente de la situación económica por la que atraviesa el país,  también logra  unión en su colectivo de trabajadores para sembrar variedades como habichuela, lechuga, quimbombó, calabaza, yuca, maíz, tomate para satisfacer la demanda de sus clientes, sin tener que invertir en la compra de estos productos.

Dentro de las proyecciones a corto plazo, tiene previsto la puesta en marcha de una casa de cultivo para elevar sus producciones y abastecer de hortalizas ña entidad. Sin duda alguna, estos son los hombres siempre imprescindibles.