La casita infantil “Sonrisa de educadores” se ubica en locales de la escuela primaria Eberto Polanco en el municipio de Consolación del Sur. Durante dos meses su colectivo trabajó en el acondicionamiento de los locales con la colaboración de vecinos y familiares de los estudiantes.
“fueron dos meses de trabajo intenso. En los cuales los trabajadores de la escuela recibieron el apoyo de los familiares de los estudiantes de nuestro centro, vecinos de la comunidad y trabajadores por cuenta propia. Entre las acciones que realizamos estuvo el cambio de la carpintería, así como eliminar los peligros potenciales para niños menores y creamos las condiciones para el calentado del almuerzo y la preparación de la merienda de los niños que matricularían en la casita infantil”, comentó Enibis Gutiérrez, Directora de la escuela primaria Eberto Polanco
Los locales reacondicionados tienen capacidad para 60 niños, hijos de padres que trabajan en el sector de la educación y familias que residen en el barrio en transformación donde está ubicada en el consejo popular de Pueblo Nuevo.
“me siento muy contenta y estoy orgullosa que en mi propia escuela tengamos esta oportunidad las madres educadoras. Entre los beneficios está que tenemos a los niños donde mismo trabajamos y bien atendidos por personal especializado”, asegura la mamá Melani de Armas García, trabajadora de la escuela primaria Eberto Polanco
“realmente es un lugar bonito, acogedor. Las especilistas son muy cariñosas con los bebés. Ellos aprenden mucho, se desarrolla y se hace independiente. El lugar es muy acogedor y las educadoras que atienden a los niños son especiales”, agrega Leidys Escobar Flores, residente en el CP Pueblo Nuevo y otra de las mamás beneficiadas
La casita infantil cuenta con los medios necesarios para la estancia de los infantes de 1 a 4 años, que son atendidos por 11 educadores especializados en la enseñanza pre escolar.
“el colectivo que atiende a los niños de 1 a 4 años está capacitado para capacitado para lograr su máximo desarrollo integral. Esto es un sueño de los educadores de Consolación del Sur, hecho realidad. Nos alegar saber que contribuimos al cuidado de los niños, que las madres saben que están protegidos, que los educan y ello les posibilita ir a trabajar más contenta”, Yasmari Suárez Noda, educadora responsable de la casita infantil Sonrisa de Educadores
La creación de casitas infantiles en centros estatales es una alternativa necesaria que contribuye con la participación plena de las mujeres en actividades sociales, además de que propicia la formación de hábitos en los niños de las primeras edades. Iniciativas como “Sonrisa de Educadores” deberían multiplicarse, para el bienestar de las familias.
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