Según refiere la Revista española Hosteltur, un nuevo entorno en la demanda turística apunta a la preferencia por destinos naturales, saludables y cercanos y para alcanzarlo, nada mejor que el desarrollo del turismo alternativo.
Hacia ello, una región de incalculables recursos turísticos identificados, a lo largo y ancho de la geografía de la más occidental de las provincias, Pinar del Río, exhibe múltiples incentivos para la realización de las modalidades turísticas genéricas como Turismo de Naturaleza, Turismo Rural y Turismo Cultural.
En la actualidad la provincia es conocida a nivel mundial por poseer una Reserva de la Biosfera de las 6 existentes en Cuba, expuesta por la UNESCO: Guanahacabibes (en el año 1987), y por disponer de la zona de Viñales, declarada por la Convención Mundial de Patrimonio, con la categoría Paisaje Cultural de la Humanidad (en 1999).
Los alojamientos rurales serán una opción importante en la etapa post confinamiento. Quiere decir que la naturaleza será importante en los viajes del futuro; investigadores del tema afirman que las tendencias de la sociedad de vivir en contacto directo e intercambiar con los espacios naturales, es de las principales demandas insatisfechas que caracterizan el mercado europeo. Según estudios de la Organización Mundial del Turismo son: viajes de descubrimiento (visitas a espacios naturales, culturas y tradiciones autóctonas), senderismo, cicloturismo, observación de la flora y la fauna, aventuras y diversión en la naturaleza, actividades al aire libre como cabalgatas, agroturismo, patrimonio natural y cultural y visitas a áreas protegidas y reservas naturales.
Aproximadamente el 80% de los visitantes que eligen Pinar del Río, provienen de Europa y a pesar de las evidentes preferencias de los mercados en el territorio, Pinar del Río aún no ha logrado convertirse en un destino turístico, pues sus regiones hasta hoy, no han estado dentro de las categorías más priorizadas de las tendencias del turismo internacional.
Sin embargo, el escenario mundial hoy se vuelve más sensible, necesitado de hacer cambios sustanciales en los comportamientos humanos. Y es así como el siempre curioso visitante buscará destinos que le inspiren confianza ante un nuevo modelo turístico, que tenga como premisa evitar las aglomeraciones, el uso de medidas efectivas de higienización, la aplicación de esquemas de pago más económicos, la acción social humanista en primer orden y por supuesto, la garantía a su seguridad integral.
Referencia bibliográfica: www.hosteltur.com