La Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar ha vuelto a demostrar su rápida capacidad de respuesta para producir alimentos tras el paso de fenómenos meteorológicos extremos.
Así lo afirmó Elizabeth Peña Turruellas, directora nacional de ese importante movimiento, a propósito de la completa recuperación en esta provincia de las unidades afectadas por el huracán Ian.
A poco más de un mes de que el devastador fenómeno meteorológico provocara la pérdida de más de 8000 canteros en los 279 organopónicos y cultivos semiprotegidos de Pinar del Río, la funcionaria señaló que ya se han obtenido producciones de hortalizas como la lechuga, la acelga, la espinaca y el cebollino.
Además, afirmó que existen otros cultivos que se encuentran en avanzada fase de su desarrollo, como el pepino, la habichuela, el tomate, la zanahoria y la col.
El intenso trabajo de recuperación ha incluido la aplicación de 3000 toneladas de abonos orgánicos y la perforación de pozos en organopónicos que no contaban con ellos, a fin de no tener que emplear el agua que se bombea para la población por la red de acueducto.
La directora nacional del Movimiento de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar, reconoció la participación de los estudiantes y de los trabajadores de la mayoría de los sectores de la provincia, en jornadas de trabajo voluntario, para devolverle la vitalidad a la infraestructura dañada.
En esta labor también han sido muy importantes los aportes de semillas realizados por nuestros institutos de investigaciones agrícolas y por los campesinos del Movimiento sin Tierra, de Brasil, aseveró.
Peña Turruellas señaló que el embate de Ian también dejó como lección, que todos los territorios deben priorizar la producción local de semillas y su conservación para garantizar la demanda de este estratégico insumo.
Por otra parte, advirtió que una parte de la producción de posturas debe realizarse en bandejas o cajas de plástico o poliespuma, para facilitar su traslado a locales seguros en casos de intensas lluvias o de ciclón, en aras de acortar luego el tiempo de recuperación.
«Es imprescindible que cada unidad cuente, de manera permanente, con el abono orgánico necesario para su aplicación, la semilla de los cultivos de más rápida respuesta para el consumo, alternativas para el riego y los medios biológicos de protección fitosanitaria como la cal y la tabaquina», advirtió.
A partir de las enseñanzas del huracán, aseguró que el grupo nacional, de conjunto con las delegaciones de la Agricultura y las direcciones de las provincias, darán seguimiento en todos los municipios del país a las actividades de prevención y preparación para enfrentar los fenómenos meteorológicos extremos.
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