No hay dudas de que el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 constituye un enemigo común para la humanidad. Múltiples son las medidas adoptadas en centros laborales e instituciones educativas para prevenir el contagio y expansión del virus.

Un ejemplo de ello es el círculo infantil “Victoria de Viet Nam” en Minas de Matahambre, pues los educadores que allí laboran desarrollan charlas educativas, a partir de los espacios disponibles, para capacitar a los infantes en las acciones que deben practicar.

Al preguntarles a los pequeños como podemos evitar el contagio ellos respondieron:

“Yo me lavo las manos, con agua y jabón, muchas veces al día: cuando meriendo, almuerzo, juego y después de ir al baño,” Joel Caso Hernández de quinto año de vida.

“Cuando tozo o estornudo lo hago con el ángulo interno del brazo. También utilizo pañuelo o servilleta, Reyinalda Luis López de quinto año de vida.”

“Las titas y la enfermera nos dijeron que si tenemos tos o catarro no debo asistir al círculo, Yohannelis Requejo Suárez de quinto año de vida.”

“Nosotros no nos saludamos con besos, ni abrazos para no contraer una infección respiratoria, además dormimos distantes, uno del otro, Carlos Emilio Estrabao Martínez,
alumno de Preescolar.”

El comienzo de la jornada en el círculo infantil “Victoria de Viet Nam” lo acompaña un protocolo en aras de mantener libre de riesgo la institución, así lo testifica la licenciada en enfermería María Julia Hernández Remedio.

“Me ubico en la puerta de entrada para realizar la recepción de los niños, allí los observo y les tomo la temperatura corporal, en caso de presentar algún síntoma de Infección Respiratoria Aguda, le indicamos al padre que lleve al infante a la consulta habilitada en el policlínico José Elías Borges.

Después del pesquisaje las educadoras trasladan los pequeños hacia cada salón y me dirijo hacia las áreas de juegos para supervisar la limpieza e higienización en cada una de ellas.

Acto seguido me acerco a la cocina y chequeo el estado de los utensilios de trabajo, las bandejas y cubiertos, así como la correcta cloración del agua.
A continuación voy hasta la lavandería para inspeccionar el lavado de los paños de manos, forro de catres, ropa y toalla de los niños. Siempre les insisto en el cumplimiento de las medidas para evitar la virosis.

Por su parte Amarilis Iglesias González, jefe del departamento que atiende la primera infancia en la Dirección Municipal de Educación manifestó que redoblan las medidas higiénico-sanitarias, a partir de la actual situación epidemiológica.

“El niño con secreción nasal, tos o cualquier sintomatología de una infección respiratoria aguda (IRA), lo suspendemos. Continuamos con las medidas preventivas, es decir todo lo referente al lavado correcto de las manos, a la utilización del nasobuco, a la higienización de los salones, baños, cocina y locales de la institución con detergente y cloro.

También incrementamos otras tales como: la entrada de los infantes a partir de las nueve de la mañana hasta las tres pasado meridiano. Con ello evitamos que los niños se expongan a la frialdad de la mañana y de la caída de la tarde.

Además no permitimos la entrada a la institución de los padres, es decir, en el portón principal de la institución, cada educadora y asistente recoge al pequeño que le corresponde y lo traslada hacia el salón.”

Acatar con cabalidad cada una de las medidas preventivas y tener conciencia del riesgo, disminuye la posibilidad de contraer la Covid-19 y por ende suma bienestar a nuestra salud y a la economía del país.

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