Con la confirmación hoy, 18 de septiembre, de un caso importado de la Covid-19 del municipio San Juan y Martínez, la provincia pinareña registra que 10 de sus once territorios han padecido la enfermedad y solo se mantiene ileso Sandino, el extremo más occidental del país.
La nueva persona diagnosticada es una trabajadora de la salud de la Brigada Henry Reeve, procedente de Honduras y se mantiene hospitalizada en La Habana, por la que no constituye riesgo para sus coterráneos locales.
Hacía 12 días que los pinareños no tenían nuevos diagnósticos y ahora su estadística asciende a 117 confirmados por PCR, de los que continúan ingresados en el León Cuervo Rubio dos autóctonos de la ciudad, uno del área Pedro Borras y otro de Turcios Lima; aparte de dos trabajadores de Salud importados (uno de la Palma y otro de San Juan), y que están en una unidad hospitalaria de La Habana.
En confinamiento están los dos ingresados, uno por contacto y cinco sospechosos; no hay trabajadores sanitarios ni viajeros en cuarentena. Los PCR realizados suman 11 807.
A modo de recordatorio Pinar del Río tuvo su primer enfermo en Viñales el 16 de marzo, una turista belga que después del proceso y su alta epidemiológica viajó a su país, y tuvo su último confirmado el 17 de mayo, un caso de Mantua detectado por una pesquisa selectiva de Estudio Poblacional.
La provincia no ha tenido fallecidos y solo registra un grave en todo el trayecto de la enfermedad, una señora de San Luis.
La provincia entró en la tercera fase de la Covid-19 a partir del 20 de julio y disfrutó de un lapsus de tranquilidad hasta fecha reciente, que aparecieron los casos del municipio La Palma, asociados al evento de Mariel y que llevaron a cuarentena a las comunidades Sanguily y Las Cadenas, hasta hace 48 horas.
También se produjo un evento local en la ciudad, que aún continúa en desarrollo, con dos pacientes hospitalizados y dos manzanas en aislamiento sanitario bajo estricto control.
Las autoridades siempre muy atentas para evitar descuidos, con el monitoreo de la frontera, la exigencia de todas las medidas conocidas y un rigor para garantizar las necesidades alimentarias de la población.
La premisa es que mientras la Salud y los demás organismos de control preservan a los ciudadanos, ellos deben cumplir con su elemental norma de protegerse y cuidar a los demás.
NOTA: Minutos después de esta informaciòn las manzanas de la ciudad, que estaban en cuarentana, pasaron a la normalidad por decisiòn del Consejo de Defensa Municipal y la anuencia del Consejo Provincial y Salud.
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