Los centros de recurso y apoyo en la Educación Especial.



Todos somos iguales……
                                   No importan nuestras diferencias……
                                   No ver no es una limitación.
                                   Limitación es no tener una oportunidad.
                                                                                      Eduardo Galiano

La Escuela Especial José Martí es un centro de recursos y apoyo para el trabajo con las niñas y niños con discapacidad visual  y auditiva que se encuentran en los diferentes niveles educativos. Dentro de su Proyecto Educativo Institucional se le da esmerada atención a la estimulación temprana dirigida a educadoras,  promotoras del PETH y en especial a la familia de niños con deficiencias sensoriales.

¿Qué es la estimulación temprana?
Es un conjunto de actuaciones planificadas con carácter global, interdisciplinario, diferenciado para dar respuestas a las necesidades del desarrollo del niño y potenciar el proceso evolutivo desde la etapa de la concepción hasta la primera infancia. Al diseñar programas específicos para cada niño debe tenerse en cuenta las necesidades y circunstancias en todos los ámbitos: biológico, psico-social, emocional, familiar, escolar, cultural o socio-económico.

En los niños con discapacidad visual se trabaja de forma priorizada la estimulación visual que es un proceso organizado y dirigido a incentivar el desarrollo visual desde los primeros años de vida, para influir favorablemente en el desarrollo de la percepción visual. Es una práctica cuyo objetivo es promover el uso eficiente de la visión en bebés y niños. Es importante la presentación de objetos visuales y materiales en permanente orden y secuencia, para desarrollar al máximo la potencialidad visual del individuo con baja visión teniendo en cuenta su desarrollo general. Los programas de estimulación visual están diseñados, para ayudar a los niños con deficiencias visuales graves, a encontrar sentido a lo que ven, a saber interpretar las sensaciones que perciben. Este trabajo no es únicamente del estimulador ni del técnico de rehabilitación, sino que tanto la familia como el propio niño deben poner mucho de su parte.

Es un esfuerzo en equipo que requiere paciencia, comprensión y buena comunicación si se quieren conseguir los objetivos propuestos. Si bien es cierto que las técnicas de estimulación visual son aplicadas por el personal especializado, la familia debe ser asesorada para el uso continuo de la visión por parte del niño.

La Escuela Especial cuenta hoy con un salón de estimulación con el equipamiento necesario que permite dar atención a los niños con discapacidad visual, logrando con éxito la orientación dirigida a la familia y otros agentes y agencias educativas.