“Mejoramos la base pétrea en seis kilómetros y medio de carretera, que va desde el entronque del poblado Julio Antonio Mella, hasta el final de la demarcación La Yuquilla, conocido este tramo en Minas de Matahambre como El Desvío”, aseveró en plena faena Luís Enrique Rodríguez Rivera, jefe de la obra.
Junto con la demolición de la antigua capa de asfalto con un deterioro significativo, también ampliaron mucho más la ruta. Ahora se visualiza un terraplén, con los requerimientos técnicos que demanda la ejecución del proyecto, para más tarde comenzar con el asfaltado.
La reparación de la carretera la acomete una brigada del Ministerio de la Construcción (Micons), la misma cuenta con el parque tecnológico necesario para desarrollar las acciones.
“Hasta el momento los inspectores y especialistas opinan que el trabajo realizado por nuestra brigada es bueno. Tuvimos en cuenta cada uno de los aspectos y regulaciones establecidos para este tipo de vial.
Los choferes que transitan por aquí, a pesar de que solo existe el terraplén, ya sienten que hay un cambio, pueden desplazarse mejor los autos. Con anterioridad los huecos que mostraba el camino lo hacían casi intransitable.
Estos kilómetros de carretera son muy importante para los mineros y también para los turistas que se dirigen a la playa Cayo Jutías, un balneario muy frecuentado”, dijo Rodríguez Rivera.
Los inversionistas del proyecto Polimetálico Castellanos aseguran el combustible para que la tarea no se detenga, mientras los obreros del Micons avanzan de sol a sol con buldóceres, cilindros, carros cisternas y motoniveladoras.
El movimiento de tierras es notable, entre el polvo se distingue el resurgimiento de un nuevo vial. Esta vez al servicio del municipio, una carretera que favorecerá la transportación rápida de pasajeros y mercancías.
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