La reducción y disminución de la contaminación ambiental es una urgencia nacional y lo mismo sucede en Pinar del Río, por lo que para ello existen programas estatales concebidos en un cronograma hasta el 2030, en una de sus fases más abarcadora.
La contaminación es generada por múltiples factores y uno de los principales es el humano, por la forma en que dispone de los recursos y la acción continuada de su uso en la producción, los servicios y la propia convivencia.
El Consejo de la Administración Provincial (CAP) mantiene su control permanente y por tal motivo Yuri Triana Velázquez, delegada del Citma en la provincia, presentó recientemente el comportamiento de los programas sobre el tema.
Desde 2017 existe un plan sobre la reducción y control de la contaminación y el pasado año en la implementación de la Estrategia Ambiental Territorial se identificaron las acciones e instrumentos que permitieron garantizar protección y uso racional de los recursos naturales.
El territorio trabaja en la solución o mitigación de los seis principales problemas ambientales, degradación de los suelos, pérdidas en la diversidad biológica, pobre manejo integrado de los recursos hídricos, impactos del cambio climático, contaminación y deterioro de las condiciones higiénicos sanitarias en asentamientos humanos.
Por lo antes expuesto hay un proceso de conciliación estable con la Delegación Provincia de Recursos Hidráulicos y el Centro Provincial de Higiene y Epidemiologia, aunque existen vínculos con otros muchos organismos, porque en las 54 fuentes contaminantes identificadas hay participación de la Agricultura, Industria Alimentaria, Minsap, órganos del Poder Popular, Minfar y Ministerio de Turismo.
Los grandes objetivos de control de la provincia sobre los que se trabaja sistemáticamente para avanzar en su solución son la industria La Conchita, los hospitales Abel Santamaría y León Cuervo Rubio, el vertedero municipal de Viñales, policlínico Fermín Valdés Domínguez, Combinado Lácteo de Sandino y el grupo electrógeno Fuel Oil Briones Montoto, cada uno con una complejidad diferente en tamaño y solución.
Para la atención de los planes contra la contaminación cada año el estado destina financiamiento y equipos, aunque el principal hándicap es la acción humana que en ocasiones es morosa.
Las autoridades a todos los niveles comprenden que eliminar la contaminación es también una forma de satisfacción social, por eso el control y exigencia, debe ser cada vez más estricto.
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